No hay excusas. La tecnología no determina la sociedad; es la sociedad la que determina la tecnología. Algunos escépticos como Morozov o Lanier esgrimen argumentos preocupantes: «Los malos –los poderosos– tienen la habilidad y los recursos para regular, manipular y utilizar la comunicación digital tanto o más que los que no tienen poder». En Internet se genera información falsa de manera habitual, se viola la privacidad de las personas y los derechos civiles, y facilita diversas formas de acoso. La paradoja es que la tecnología puede ser una «fuerza destructiva y una fuerza progresista».
Hace 25 años Tim Berners-Lee creó la World Wide Web con una razón de ser: compartir conocimiento para el bien común, mediante páginas enlazadas con hipervínculos. Desde entonces ese deseo inicial ha ido erosionándose por diversas razones, hasta llegar a la actualidad. Internet está enferma y las consecuencias en nuestras vidas son muy trascendentales.
Berners-Lee además de científico, es una autoridad, por lo tanto a sus iniciativas y opiniones hay que prestarles toda la atención del mundo. Hace unos pocos días, en el discurso inaugural del evento Web Summit que se realizó en Lisboa pidió una revolución, refiriéndose a generar cambios en la forma en que Internet se regula y monetiza. El objetivo es muy ambicioso: frenar el abuso, la polarización política y las noticias falsas.
Su estrategia es concienciar a las grandes compañías que dominan Internet a través de una iniciativa que permita establecer un conjunto de principios importantes como proteger la privacidad y ser transparentes con respecto a sus algoritmos. Evidentemente, los grandes protagonistas digitales com Facebook y Google ya han respaldado la iniciativa,
Facebook y Google no son los únicos, ya son más de 50 organizaciones que han firmado el contrato que es posible consultar en el sitio oficial de la World Wide Web Foundation junto con un informe que exige una acción urgente.
Tim Berners-Lee dijo a The Guardian los motivos por los cuales decidió crear esta Carta Magna:
“Durante muchos años hubo la sensación de que las cosas maravillosas de la web iban a predominar y que tendríamos un mundo con menos conflictos, más comprensión, más y mejor ciencia y buena democracia. Pero la gente se ha desilusionado por todas las cosas que ven en los titulares”, dijo Tim Berners-Lee a The Guardian explicando los motivos por los cuales decidió crear esta Carta Magna, y añadió:
«La humanidad conectada por la tecnología en la web funciona de una manera distópica. Tenemos abuso en línea, prejuicios, polarización y noticias falsas, hay muchas formas en que se rompe. Este es un contrato para hacer que la web sirva a la humanidad, la ciencia, el conocimiento y la democracia».
La iniciativa de Tim Berners-Lee tiene tres ejes principales:
- Los gobiernos: deberán garantizar que sus ciudadanos tengan acceso completo a Internet y que se respete su privacidad para que tengan la posibilidad de estar en línea libremente, de forma segura y sin miedo.
- Las empresas: deben comprometerse a hacer que Internet sea asequible y accesible para todos, respetando la privacidad del consumidor y los datos personales. También a desarrollar tecnologías que aseguren que la web sea un bien público que pone a las personas primero.
- Los usuarios de Internet: deberían tener la responsabilidad de crear contenido web que sea relevante, construir comunidades que respeten el discurso civil y la dignidad humana. Además de luchar por una web abierta que sea un recurso público global para personas de todo el mundo.
Pero seamos realistas, las posibilidades que se cumplan estos principios son altamente complicadas, empezando porque será difícil medir el éxito del contrato. No obstante, Berners-Lee cree que va a facilitar las conversaciones referentes al tema de Internet de forma positiva dentro de los gobiernos y a todos los consejos de administración en los que se toman decisiones importantes. Además, le dará al público en general una vía para presionar a los poderosos.
Berners-Lee dijo que los términos completos del contrato se acordarían en los próximos meses. El objetivo es finalizarlo en mayo de 2019, el momento en el que más de la mitad de la población mundial estará en línea por primera vez.
Si te apetece participar activamente en el tema, te recomiendo que le eches un vistazo a la campaña #ForTheWeb ¿Te animas?
SOBRE EL AUTOR
Albert Garcia Pujadas es CEO y cofundador de Foxize. Es asimismo autor, junto con Aina Fernández Aragonès, del libro “Libres o vasallos. El dilema digital”. Puedes seguir sus artículos en su blog qtorb. En él habla de la evolución de la sociedad digital, la innovación y su impacto en el marketing y en la vida real.
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